La zamioculca es una de las plantas más sencillas de cuidar. Es originaria de la zona central de Africa, pudiéndose encontrar desde el sur de Kenia hasta el nordeste de Sudáfrica.

Tiene un crecimiento lento y hacia lo alto más que hacia lo ancho, por lo que podemos ubicarla en alguna esquina donde no quepa una planta muy ancha o frondosa. Sus hojas carnosas y brillantes nacen a lo largo de los tallos. 

Características:  La zamioculca es una planta apta para los no tan “cuidadosos” y ese es uno los motivos por lo que es tan elegida más allá de que también es muy llamativa por su forma y sus hojas.

Luz: esta planta requiere poca luz pero se adapta a todo tipo de ambiente, excepto que las expongas al rayo de sol directo. Vale aclarar que es una de las plantas más resistentes de interior porque soporta poca luz, aunque obviamente no es la situación ideal.

Ubicación: la tenés que ubicar lejos de lugares donde haya ventanas y siempre alejada de fuentes de calor.

Riego: No necesita mucho riego. Aproximadamente, cada 3 dias en verano y una vez por semana en invierno. Para saber si necesita agua, te aconsejamos observar si la parte superficial de la tierra está seca.

Como siempre pregonamos desde Bon Plant, no todos los ambientes son iguales por lo que no todas las plantas tienen las mismas necesidades. Lo más sencillo es hundir un palito de brochette o de helado y si el sustrato está seco, nos está marcando que necesita agua.